Hoy volví a ver esa luz
Asomé mi mirada por la ventana
Y pude percatarme de que estaban allí
Mis recuerdos ocultos tras una nebulosa
Aún puedo oírte
El silencio abismal de las aguas en las que me hundiste
Dónde sin piedad me dejaste ahogarme
Mirándome con lancerantes ojos
Vociferando mentiras provenientes de tus desgarradas fauces
Con una sola palabra me arrebataste mis latidos
¿Era acaso un avistamiento al fúnebre fin que le darías a lo nuestro?
Tu lengua aún escudriña mi cuerpo
Haciendo que me entregue a tí una vez más
Pero todo acaba igual
Soy sólo una marioneta de tu escena
Despierto, y aún sigo aquí
Arrinconada en el pútrido lugar dónde me encerraste
Estiro mi brazo revestido de pesadas y oxidadas cadenas
Trato de alcanzar esa utópica luz
que me colma de paz
Pero es sólo un quimérico sueño
Mi alma continúa pudriéndose en esta cueva
lóbrega e inexistente
Inmersa en tu alma
Fuí errante sin percatarme
Sólo deseo que ya no me hagas sufrir
Aunque amerite tal sufrimiento
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